Elisabetta Sirani, nacida en Bolonia en 1638, fue una pintora
italiana, así como una de las últimas representantes de la brillante escuela
boloñesa del siglo XVII.
Fue una de las primeras mujeres pintoras con
proyección internacional, pero su muerte con tan solo 27 años, truncó una
carrera que podría haber evolucionado al barroco decorativo que acabó
abanderando Luca Giordano.
Debido a su condición de mujer, Elisabetta no pudo acceder a
una formación artística en ninguna academia, por lo que tuvo que aprender en el
taller paterno.
Como dato que he encontrado interesante es el de que su
escasa destreza en el dibujo anatómico, se explicaría porque no se le permitió
dibujar desnudos con modelos vivos y reales.
Elisabetta comenzó en la pintura en 1650. Una de sus primeras
obras fue el San Jerónimo que se encuentra en el desierto de la Pinacoteca
Nazionale de Bolonia.
Ya con 19 años, se hizo pintora profesional.
Su especialidad fueron las pinturas religiosas, que producía
con mucha rapidez pero con un buen acabado.
Pasando a sus obras:
Sirani, a pesar de morir joven, dejó una gran producción que
cuenta con 200 pinturas, así como dibujos
diversos grabados. Este hecho hizo pensar que contó con una masiva
participación de ayudantes.
Respecto a su presencia en colecciones españolas parece que
se reduce a una pintura en el Palacio de Liria de Madrid (colección de la Casa
de Alba).
Entre sus obras más destacadas podríamos señalar las siguientes:
- Porcia hiriéndose en la pierna (Fundación Miles, Houston, EE. UU.)
También encontraríamos
- Retrato de Beatrice Cenci (1662, Galleria Nazionale d’Arte Antica, Roma)
- San Antonio de Padua adorando al Niño Jesús (1662, Pinacoteca Nacional de Bolonia)
- Virgen con el Niño (1663, National Museum of Women in the Arts, Washington)
No hay comentarios:
Publicar un comentario